Título: Comer,
rezar, amar.
Autora: Elizabeth
Gilbert
Colección: “Amor
y pasión” – Clarín.
Páginas: 495
Calificación: ★★★★
Sinopsis: Después
de un divorcio traumático seguido de un desengaño amoroso y en plena crisis
emocional y espiritual, Elizabeth Gilbert decide empezar de nuevo y emprende un
largo viaje que la llevará sucesivamente a Italia, la India e Indonesia, tres
escalas geográficas que se corresponden con otras tantas etapas de búsqueda
interior. Este libro es la bitácora de esa doble travesía, en la que la autora
descubrirá el placer sensual de la buena mesa y la buena conversación (la dolce
vita romana), la paz interior alcanzada mediante la meditación en Bombay y, por
fin, el deseado equilibrio entre cuerpo y espíritu en Bali.
Opinión personal.
Este es un libro que hace bastante tiempo tenía ganas de
leer pero que nunca había tenido la oportunidad, hasta que salió en la
colección de libros “Amor y pasión” de Clarín que estaba comprando y cayó como
anillo al dedo. Tengo sentimientos encontrados con esta historia, hay muchas
cosas que me movilizaron emocionalmente y otras que me frustraron un poco, pero
estoy muy contenta de haberlo leído y mucho más de haber conocido la escritura
de la autora.
“Comer, rezar, amar” es un diario personal que Elizabeth
Gilbert escribió sobre un viaje de un año que hizo después de intentar
redescubrirse a sí misma. Nos cuenta en primera persona el momento exacto en el
que se da cuenta que no es feliz y que no está viviendo la vida que le
gustaría. Después de un divorcio muy traumático y un amor precipitado, comienza
a buscarse a sí misma, haciendo cosas que de verdad desea, acercándose a Dios,
buscando conexiones espirituales que le permitan estar en armonía.
“Un alma gemela auténtica es la persona que te saca todo lo que tienes reprimido, que te hace volver la mirada hacia dentro para que puedas cambiar tu vida. Es la persona más importante que vayas a conocer en tu vida, porque te tira abajo todos los muros. Pero ¿vivir con un alma gemela para siempre? Ni hablar. Un alma gemela llega a tu vida para quitarte un velo de los ojos y se marcha.”
El libro está dividido en tres partes, Italia, India, e
Indonesia, que son los lugares en los que vivió durante su viaje. En Italia
buscó hacer cosas que la hagan sentirse bien, y con ello descubrió cuales eran
verdaderamente esas cosas. Prácticamente se dedicó a comer todo lo que
encontró, de a momentos me hizo gracia la forma en la que cualquier escena
terminaba con un buen plato de comida, pero todo era relativo a su siguiente
viaje. Elizabeth buscaba incansablemente acercarse a Dios de cualquier manera
que le fuera posible. A cualquier fuerza mayor del universo que fuera capaz de
ayudarla, ella le entregaba su fe, quizás probablemente por el pozo depresivo
enorme por el que estaba atravesando. En India conocemos el lado más reflexivo
de nuestra protagonista, que dedica su tiempo completo a rezar y conectarse con
sí misma. Quizás es la parte más aburrida del libro más que nada porque de
verdad Lizy reflexiona mucho y a veces es siempre más de lo mismo, siempre
vuelve al problema inicial y bueno, se pone un poco aburrido. Por último
tenemos Indonesia, en donde conoce personas maravillosas que marcan un antes y un
después en su vida, y en donde vuelve a conocer al amor una vez más, pero esta
vez de una forma diferente, esta vez siendo más ella misma que el estereotipo
de persona que era al comenzar a contarnos la historia.
Lo que más me gustó de este libro fue la forma de narrar de
la autora. Aunque estaba pasando por el peor momento de su vida, el más triste
y oscuro, logra contarlo todo con ironía y eso es algo que hace al libro
diferente, la hace a ella diferente y sinceramente me encantó. La primera parte
de la historia tiene una lectura súper fluida y llevadera, me enganché desde la
primera página, y aunque la segunda parte de su viaje decaiga un poco, vuelve magníficamente
a ser interesante de nuevo.
“Es casi imposible corresponder a todas las personas que nos ayudan a lo largo de la vida. Quizá sea más sencillo rendirse ante el milagroso alcance de la generosidad humana y seguir diciendo gracias, eterna y sinceramente, mientras nos alcance la voz”.
Lo principal en este libro es la interpretación. No todos
vamos a pasar por la misma situación que Elizabeth, ni vamos a hacer un viaje increíble
de un año para encontrarnos a nosotros mismos, pero si podemos sacar muchos detalles
de este libro que nos pueden empujar hacia adelante. En, lo personal, me quedo
con muchas frases hermosas atesoradas en el corazón, y una repentina admiración
por la autora. De momento, quiero ver la película, y recomendarles este
libro como lectura rápida y bastante placentera, si les gustan las historias
con mensajes directos y esas cosas.
Yo estoy muy feliz de haberlo leído.
“El amor desesperado consiste en inventarse un personaje, exigir a la persona amada que lo represente y hundirnos en la miseria cuando se niega a convertirse en ese ser de ficción”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario